Autora: Camila Blanc - Editora
La gran Chabuca Granda, reconocida cantautora peruana, dejó al Perú el legado de sus canciones. Dichas obras de arte fueron declaradas en el 2019 Patrimonio Cultural del país, por lo que son un aporte a la cultura peruana sumamente importante. Se le considera una de las peruanas más influyentes del siglo XX por sus grandes composiciones musicales, aunque no fue lo único que la artista realizó, ya que ella también escribió guiones teatrales y cinematográficos, además de poemas. La artista compuso durante tres décadas más de cuatrocientos temas y su estilo musical fue variando. La obra de Chabuca Granda se puede dividir en tres grandes etapas: la limeña y peruanista, la poética y la negra.
La etapa limeña y peruanista hace referencia a las primeras canciones de Granda, caracterizadas por el enaltecimiento de las tradiciones, sobre todo las de la capital. Durante esta época, sus canciones ayudan a recrear lugares y personajes de aquella Lima de mil amores y de diferentes lugares característicos del Perú. Este grupo de canciones fueron las que más calaron en el gusto popular. En aquellos tiempos, a los jóvenes no parecía interesarles recuperar la Lima tradicional y lo que esta representaba. Según uno de los propulsores del criollismo y amigo de la artista, Javier Luna, “Chabuca pasaba todo el día en la Asosiación de Artistas Aficionados (AAA). Personajes como Raúl Porras Barrenechea y Jorge Basadre eran tíos de los chicos que integraban la asociación.” Esta fue la única manera que encontró Chabuca Granda de profundizar en ese tema del que nadie hablaba y que a ella tanto le llamó la atención.
La etapa poética se caracteriza por haber tenido la influencia del círculo de jóvenes poetas por los que se rodeó Granda durante la primera mitad de la época de los setenta. Por lo mismo, el contenido era más abstracto y experimental. En este periodo los tópicos limeños ya no son recalcados en las composiciones de la cantautora, y aparecieron en su repertorio las canciones de corte político (Paso de vencedores y su respuesta en El Surco), erótico (Cardo o ceniza), o mucho más orgánico, libre de vínculos evidentes (Canterurias). Las opciones musicales empiezan a ampliarse, puesto que la música de Chabuca Granda empezó a ser influenciada por el jazz, la música mexicana y la bossa nova. En este grupo de canciones se encuentra el ciclo dedicado a personas cuyas muertes impactaron profundamente a Granda, como el poeta Javier Heraud y Violeta Parra.
La última etapa, la negra, se da a finales de los setenta. Es en esta, donde Chabuca Granda comienza a centrarse en la música afroperuana, en la que trabajó hasta el final de sus días. Los landós y festejos resaltan en este grupo de canciones con bastante fuerza, al igual que el respeto por la cultura negra. La relación con personas como Victoria Santa Cruz, se remonta a su juventud y es ella quien ayuda posteriormente a Chabuca Granda, a contactar con grandes figuras como Carlos "Caitro" Soto y Eusebio «Pititi» Sirio. Ambos acompañaron desde el cajón, la percusión y el baile, enriqueciendo la música y espectáculo de las composiciones de la cantautora.
Las canciones de Chabuca Granda siguen presentes. Actualmente miles de cantantes han interpretado las canciones escritas por María Isabel Granda Larco, tales como Yma Súmac, Eva Ayllón, María Martha Serra Lima, Juan Diego Flórez, Raphael, Raúl Di Blasio, Julio Iglesias, Plácido Domingo, por citar algunos.
Las canciones de Chabuca Granda, revolucionaron la música criolla y rompieron con la estructura convencional del vals peruano y sus melodías, no solo los ritmos, sino quebrantaron la estructura de la poesía convencional, el ritmo de sus canciones evitaba las rimas, consonancias y métricas dadas. Siempre tuvo un estilo de música sincopado y una técnica de relacionar la letra de sus canciones con la melodía. Su voz grave fue la marca distintiva de sus composiciones, lo que les dieron un estilo conversado y matizado. A partir de una relación ambigua con la tradición, respetuosa de ella, pero al mismo tiempo con ideas renovadoras, Chabuca Granda reinventó la música peruana.
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