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Mostrar el camino hacia Dios mediante los Ejercicios Espirituales y el discernimiento

Foto del escritor: La Voz del LoboLa Voz del Lobo

Autor: Cristobal Muente

 

En el 2019, el padre Arturo Sosa SJ, general de la Compañía, presentó las nuevas Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús. Estas preferencias tendrán vigencia hasta el año 2029.


¿Qué son las PAU?


En palabras de Arturo Sosa: “Las Preferencias ofrecen un camino espiritual. No pretenden establecer unos objetivos o intervenciones apostólicas estáticas, son más bien medios dinámicos que nos permiten seguir siendo guiados por el Espíritu de renovación que inspiró la CG 36. Las Preferencias Apostólicas Universales son orientaciones, no prioridades. Una prioridad es algo que se considera más importante que otras cosas; una preferencia es una orientación, una señal indicadora, una llamada. Las Preferencias no tienen que ver sólo con el hacer, sino con el ser: comprometen nuestra vida entera.” (Sosa, 2019)


Luego de conocer un poco más de las PAU, pasaremos a enfocarnos en la primera Preferencia, Mostrar el camino hacia Dios mediante los Ejercicios Espirituales y el discernimiento. Esta Preferencia Apostólica es un llamado a transmitir y compartir con el prójimo el discernimiento y los Ejercicios Espirituales de San Ignacio para enseñar el camino hacia Dios. La Sociedad Secular de hoy en día dificulta la misión de evangelizar es por eso que debemos proponernos a colaborar con la Iglesia a vivir la sociedad secular como un signo de los tiempos que ofrece la oportunidad de tener una renovada presencia en el seno de la historia humana.


Por otro lado, debemos vivir más a fondo los Ejercicios Espirituales para encontrarnos con Dios y nosotros mismos. También estamos llamados a ofrecer esta herramienta privilegiada en todas sus modalidades posibles. Sobre todo en jóvenes para abrirles la oportunidad de que se encuentren a sí mismos y sigan en el camino de Cristo a través de la espiritualidad que deriva de los Ejercicios.


La primera preferencia nos llama a contener el discernimiento como un hábito. Esto es para que en todas nuestras decisiones seamos guiados por el Espíritu Santo. No hacer lo que está bien sino hacer lo mejor, lo máximo. El ser conducidos por el Espíritu Santo en nuestra toma de decisiones nos ayudará a encontrar la voluntad de Dios.


Nosotros como alumnos y alumnas ignacianos estamos llamados a escuchar el llamado y las propuestas como estas. Nosotros somos los agentes de cambio que tienen la oportunidad de hacer que estas Preferencias Apostólicas Universales no se queden en el aire. Tenemos que actuar como los líderes ignacianos que somos.






Referencias


Bibliografía:


Arturo Sosa, S.J., Prepósito General, Carta a los Superiores Mayores, Abril 21, 2019



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